Sobre aquello imperceptible que descubra, me movilice y emocione, dejare testimonios en este libro de a bordo; lo elaboré con la transparencia del cristal, para que pueda ser compartido, y procurar asi el nacimiento del ansiado dialogo....

viernes, febrero 24, 2006

LA ULTIMA CONJETURA

Las conjeturas suelen surcar la línea de los pensamientos, así como las gaviotas lo hacen para el deleite de quien las contempla, delizándose sobre la orilla del mar a escasos metros de altura, al atardecer, escasos momentos previos al crepúsculo, para retornar a sus nidos. Ese hombre allí sentado, exactamente en ese sitio, era uno de los tantos que disfrutaba ese epectáculo casi innerrable, pues es imposible describir tantos detalles que rodean este fenómeno natural en absoluta libertad, casi en estado salvaje, como todo lo que se despliega así ante nuestros sentidos , para que podamos comprender el mensaje que esa vida en movimiento nos quiere develar. La "formación" parecía el convoy de un trencito volador del cual cada una de las centenares de aves se asemejaban a pequeños vagones del mismo. Lo hacían en distintos grupos que nadie sabrá jamás cómo llegan a ordenarse. Así retornaban a diario, siempre a la misma hora, hasta su reservorio de aves migratorias, en Punta Rasa, San Clemente del Tuyú, Provincia de Buenos Aires, donde el Río de la Plata abraza al Oceáno Atántico en un majestuoso encuentro. Nuestro observador, no veía las horas de embelezarse como lo hacía todos los años, casi en el crepúsculo, en esa misma playa, con el vuelo mágico de los distintos "trencitos". Y allí estaba cómodamente instalado, café en mano, cigarrillo, y sus deseos del éxtasis a flor de piel. Pero esa tarde, algo había ocurrido, las gaviotas faltaron a la cita. - Tal vez, se dijo extrañado e inocentemente, ya hayan pasado hoy -

Y fué entonces cuando sus conjeturas sobre esta lamentable ausencia, emprendieron un giro inesperado en su mente, para trasladarlo hacia otras latitudes de su propio mundo interior. Y luego de un largo tiempo se quedó impávido. Es que ya no tenía el mar inifinito frente a él, sino los reflejos que guardaba de otras épocas, esta vez con el vuelo de otros seres que revoloteaban siempre en su memoria, en el majestuoso escenario del teatro de la vida . ¿Pero qué pasó que tampoco podía divisar a su entrañable grupo de amigos de la adolescencia, con quienes en una playa no muy distante, solía rodearse a esa misma hora, fogón de por medio , cada verano, para cantar todo lo que estaba de moda, o lo que las miradas cómplices de algún primer gran amor allí presente les solía inspirar tanto a unos como a otras. De pronto, inesperadamente, volvió a aparecer el mar ante sus ojos, y sintió entonces la angustia de no poder divisar una sóla de las gaviotas, para tratar de encontrar en ella una respuesta a sus conjeturas, procurar un indicio ante tantas ausencias inespertadas en su vida. Y se incorporó bruscamente, como impulsado por una fuerza misteriosa. Es que al no ver a ninguna de esas entrañables criaturas del mar, su ausencia la asoció otra vez con seres que ya no aparecían ante su vista en ese instante , a los que también había observado volar muy cerca y tampoco estaban presentes. Sintió como si se hubiese quedado ciego. Se recriminó entonces, -Por qué te dejé partir de mi lado a tí, justamente a tí, divina, con esa mirada lánguida y exquisita como tus besos, si hasta fuiste capaz de dejarme un recuerdo imborrable de uno de nuestros encuentros, que aún me dejó marcado, aquél señalador con dibujos de violetas, adornado con esa frase, tan sutil como tú?, "Para que siempre me recuerdes como una flor" - Y otra vez, la desesperación y el vacío en la orilla del mar, a la que se iba acercando cada vez más, con sus brazos extendidos, como quien busca un abrazo . Si exitieran las proyecciones porporcionales entre entes de distintos ámbitos, él sentía que por cada una de esas aves ausentes, le faltaba en su alma poder mirar, palpar, gozar, la existencia de la misma cantidad de personas tan estrechamente ligadas a sus afectos más profundos. Y se desesperaba conjeturando, ¿ por qué no podía(volviendo a su delicado escenario sensorial) observar en ese instante a sus viejitos bailando un tango, acurrucados mejila a mejilla , para su deleite, aprehendiendo así, casi inconcientemente por su temprana edad de aquél entonces, qué significaba el amor sublime ?

Las graciosas y dulces gaviotas no habían salido a su encuentro, e inmerso a causa de esa desilusión en otras contemplaciones, más profundas, y desde ya no menos queribles, tampoco pudo deleitarse con el viaje temporal que su ser realizó alguna vez ante ese proscenio sin telones, abierto hacia una relatividad insuperable, categórica, inflexilbe. Sí, cuando lentamente fué retornando a su realidad del aquí y ahora, a ese instante transcurrido antes que se llegara a enfriar tan siquiera el café, o a apagarse el cigarrillo, se dió cuenta que eran tantas, pero tantas, las respuestas insondeables ante tales conjeturas.

Tal vez nunca sabrá que en verdad había sólo una respuesta ante esta gran conjetura final, pues el único que ya no se percataba del cambio de rumbo de las gaviotas al momento de partir, así como de la ausencia ante el inflexible transcurrir del tiempo de las personas tan queridas atesorados en su memoria, era él. Es que la vida ya le había pasado por encima como una constelación de estrellas fugaces, y lamentablemente, no se había dado cuenta.

FERNANDO, EL NAVEGANTE DE MARES , RIOS Y SUEÑOS.... (para todos mis queridos amigos que me acompañan en estas vacaciones)

domingo, febrero 19, 2006

VISITARA CADA PUERTO AMIGO, A PESAR DE SU VIAJE, Y YO RESPONDO POR MI DISCIPULO...


Ha dejado a mi cuidado, este puerto donde amarra,
para que nadie arrime otro barco, por hallarse en soledad.
Partió a remotos rumbos, y ya añoro su regreso,
he sido su maestro en las artes bohemias de navegar.

El me ha querido honrar, y no deseo hacer alardes
pero me trata como a un padre, tan sólo de agradecido,
aunque ave que ha partido, ave que debe retornar,
mas de nadie se ha de olvidar , según el mensaje dejado,
estará siempre a vuestro lado, lo siente un necesidad.

Tal vez por un tiempo breve, tal vez otra vez por siglos,
nunca se sabe con mi pupilo las ideas que el mar le propone,
pero a pesar de sus V A C A C I O N E S, con sus amigos hablará.

Les deja un abrazo por mi intermedio, a todos sus queridos amigos,
Desde luego , hablo de

Fernando, el Navegante de mares, río y sueños...
(próximamamente amarrá con seguridad, en éste, su puerto de siempre.)







jueves, febrero 16, 2006


Déjame profanar a los mares del tiempo,
donde tu rumbo secreto he de acompañar,
déjame cubrir con las brumas del alba
tu desnudez rutilante que ansío albergar.

Déjame perderme en tu ojos de embrujos,
¿qué ignoto universo me harán navegar?
déjame saciarme con la miel de tu boca
llegando hasta la fuente de ese manantial.

Déjate llevar abdicando antiguos miedos,
corónate entre mis caricias durante su viaje inicial,
recorrerán todas las joyas de tu fatuo cuerpo cantera
y honrando esa infinita entrega, yo te sabré sublimar.

Déjame arribar a tu ansiado puerto de corales,
orienta mi osada nave para que allí pueda fondear,
y cuando palpitemos unidos por nuestros desbordes,
ansiaré que me mires mucho, querré descubrirte más.

Déjame atenuar tu magma, el volcán se va calmando,
necesito susurrarte al oído que en ti encontré la paz,
mientras han transitado nuestras almas ensambladas
por esos mares del tiempo, para jamás retornar.

FERNANDO, EL NAVEGANTE DE MARES, RIOS Y SUEÑOS.....

sábado, febrero 11, 2006

EL QUE AUN NO RINDIO SUS ARMAS


15.1 El primer sello (6:1)
(Ap. 6:1) Vi cuando el Cordero abrió uno de los sellos, y oí a uno de los cuatro seres vivientes decir como con voz de trueno: Ven y mira. {2} Y miré, y he aquí un caballo blanco; y el que lo montaba tenía un arco; y le fue dada una corona, y salió venciendo para vencer.

Yo ya he visto los dragones en sus cuevas
recorrí palmo a palmo el oscuro laberinto,
he vencido al Minotauro emergiendo soberbio
con la intención de indicarme cuál era el camino.

Descubrí al lobo vestido de cordero
no pude evitar el grito cuando mostró sus fauces,
una luz blanca tiñó incandescentes mis ojos
pero del viaje volví, y ya nunca seré el de antes.

No obstante tallé otra vida, para atesorar lo positivo
se gestó en perfecta simetría entre los dos,
cuando alcanzamos el ensamble más profundo
cantando al ritmo de un orgasmo el arrorró.

Hoy desprecio que sólo me endilguen fracasos
coros fantasmales en tenebroso derredor,
temibles como cuervos por quien aún no ha muerto
al haberse eregido en impiadoso luchador.

Ya no quiero oír más las puertas que se cierran
apuesto aún en la nada por aquéllas que se abren,
y el que todavía no comprende mi entelequia
que desafíe al laberinto, del cual no cualquiera sale.

¿Por qué tolerar más olvidos descarnados?
rendiré cuentas para quien ya no las convoca,
con el orgullo de seguir navegando la vida
hacia el goce triunfal que la autenticidad provoca.

FERNANDO, EL NAVEGANTE DE MARES, RIOS Y SUEÑOS...

viernes, febrero 10, 2006

POR EL HONOR QUE OTORGA UNA BOHEMIA

Mi adorable y talentosa amiga Bohemia, me invita a un juego "cadena", pero en este caso, se mezcla la poesía al estilo Tanka o Haiku y es lo que le da un mayor encanto a esta propuesta.
Decir mucho con pocas palabras.

(Bohemia, estoy copiando textualmente tu introducción para no dilatar más mi promesa al honor que me has hecho al elegirme, vale?)

Las reglas son las siguientes: Cada jugador invitará a sus participantes, indicándoles las reglas del juego y avisándolo en su blog. El invitado iniciará su composición con la frase "pivote" del participante anterior, quien deberá resaltarla con cursivas y en color rojo. La forma será de tanka (tipo de poesía tradicional japonesa.) La forma tradicional consta de cinco versos de 5-7-5-7-7 sílabas. Un tanka puede ser un texto, dividido en cinco partes, usando treinta y una sílabas o menos, permitiendo que fluya la prosa poética dictando la longitud de las líneas que quedarán separadas por signos de puntuación. (La disposición de las sílabas puede ser irregular pero siempre conservando el mismo número de versos) El invitado elegirá la unidad rítmica que prefiera. Debe existir el concepto de ‘pivote’, o eje del poema: en algún punto en la tercera línea va a existir una imagen que relaciona o liga las dos primeras líneas con las dos últimas. El tema será libre. Cada participante debe señalar el blog del que proviene y enlazar a los blogs invitados. El “pivote” que me ha dejado Bohemia es:

"Avergonzado"


Avergonzado
desprecié tus temores

Invadiéndote
al no hallar mis ansias
mejor destino final


Mis invitados son:

ANA MARIA

AMY

INCONDICIONAL

LAURA

UMA

domingo, febrero 05, 2006

RIDI, PAGLIACCI....

“ El hombre es el ser y sus circunstancias”
Ortega y Gasset.-

La observaba con lujo de detalles a medida que se iba aproximando hacia su sonrisa.
Presintió que no iba a faltar al lugar de esparcimiento habitual, como si supiera que se había transformado en la razón de su existencia .
Avanzaba decidido a abandonar para siempre los miedos, las fantasías, los diálogos al viento exhalando pensamientos incongruentes.
A través de ella podría desprenderse al fin de sus vicios más antiguos de lobo solitario, como esa atracción por el aroma de los burdeles.
Es que indudablemente estaba hecha de otra madera, diferente a todas, como el sándalo.
Se la podría describir tal como él la estaba contemplando en ese instante: una obra maestra de la paleta de un depurado artista, dispuesta a brindarle la contención anhelada entre la piel de sus alas.

Pero en realidad, Sveta , no se sentía muy feliz con una cita algo forzada.
Más allá de ser un hombre ya maduro, no percibía un estremecimiento que la invadiera, para compartir a su lado un amanecer, ansiando al instante del latido, recomenzarlo todo.
Pero su tía ya entrada en años le insistía - Una chica como tú, ya no puede dejar de formalizar una relación seria, ya arreglaste algo con el señor de esa gran tienda que te presenté ? .
Discurso al que se le caía naftalina a raudales, y agobiante además por la manía repetitiva.
Entonces resignadamente sonreía, dispuesta al sacrificio de la compañía de alguien tosco, con escasa cultura, pero que reunía todos los requisitos para satisfacer a la única familiar que le quedaba.
Nunca se perdonó, no haber aceptado tiempo atrás, la gentil invitación de un alumno suyo de la universidad, para ir a caminar aquélla tibia y nublada tarde, por la orilla del mar.
Pero cuando su madre murió, ella encontró en la tía Ivana la dulce sustituta, y esos avatares son deudas de amor, que con sacrificios se suelen saldar.

El se sentía molesto con tanto bullicio a su alrededor, niños que corrían detrás de una pelota esparciendo arena, otros que le gritaban disparates a sus hermanos, justo ahora que estaba tan próximo, sin poder retirar su vista de ese rostro semejante al de una estatuilla de mamushka niña, pues el azar quiso que no obstante haber nacido en Moscú, sea ahora profesora universitaria de literatura y castellano en Galicia.
Faltaban ya escasos metros, e iba adquiriendo mayor dimensión la belleza y el encanto de esa pintura viviente.
Nunca se supo qué lo hizo contenerse, para no putear a otros niños, que inesperadamente se enredaron entre sus piernas mientras jugaban y corrían a su alrededor, haciéndolo trastabillar, hasta que lo arrojaron al piso.
Con el ramo de magnolias desecho por la caída, su moderno pantalón rasgado a la altura de la rodilla, estoicamente se incorporó no obstante, procurando disimular lo inocultable.

A pesar de todo, esta vez existió un abrazo frustradamente suave junto al beso delicado que Sveta recibió un tanto complacida, aunque de ninguna forma feliz .
Esto nos indica hasta donde se cristaliza, aquélla premisa tan difundida, de que en algún lugar del Universo, los destinos de cada uno, ya se encuentran escritos para siempre, como en un pergamino eterno, sellado, inviolable.
Curiosamente esa misma afirmación, fue la que en una fracción de segundos lo tomó por asalto como un golpe al corazón, cuando instantes antes, al momento de incorporarse pretendiendo armar de nuevo su ramo de magnolias, el joven soñador escuchó aquélla voz contundente gritando a los cuatro vientos: - Esveta !!!!!!!, proveniente de quien estaba acostumbrado a vociferar a diario, para que le bajen de un camión sus cajas de mercaderías.
Es que quien llegó extasiado, para dejarse atrapar por aquélla sonrisa, nunca imaginó que justo ese día, iba a coincidir con el de la cita prefijada por “su” Sveta, con un pretendiente que le asignara la tía Ivana, el que la abrazaba y besuqueaba como si fueran a fusilarlo al instante.
La imagen más allá de bizarra, fue un tanto triste, si la observamos desde una óptica panorámica y sin lugar a dudas, parecía arrancada de I Pagliacci, por aquello irremediable de “La commedia è finita".

Decidió mudarse apresuradamente, abandonando a su vez los estudios en la universidad donde ella era docente.
Allí, recordaba, la descubrió un día en su ciudad, cercana al mar.
Se martirizaba al pensar, pasados incluso ya algunos años, que tal vez podría haber cambiado el curso de su vida, el simple hecho de anunciarle la ansiada cita, en el cantero existente sobre el paredón que da sobre la playa, para poder hablarle como trató de hacerlo en la caminata frustrada de aquélla tibia y nublada tarde, ahora tan lejana, de no haber sido, por supuesto, por las benditas circunstancias.

Desearía aclarar, que la imagen que antecede a este relato, pertenece a mi antigua y entrañable amiga Sveta, nacida en Moscú, y que cursó estudios universitarios en Rusia, graduándose de traductora de castellano. También , por las circunstancias que a mí me han tocado vivir de cerca tantas veces, he perdí todo contacto con ella. Esta historia, no tiene nada que ver con su vida real más que en los aspectos detallados. "Sveta se me ha perdido ayer, se fue....... "

FERNANDO, EL NAVEGANTE DE MARES, RIOS Y SUEÑOS....