Sobre aquello imperceptible que descubra, me movilice y emocione, dejare testimonios en este libro de a bordo; lo elaboré con la transparencia del cristal, para que pueda ser compartido, y procurar asi el nacimiento del ansiado dialogo....

miércoles, enero 19, 2011

YO YACERE, TU ¿YACERAS ?

Y en el peor de los casos, si un barco zozobra, por aventurarse en recorrer
aguas extrañas, al capitán, al menos le queda siempre una salida:
no desdeñar las tradiciones, y acompañar solo a la nave, hacia su último destino.-


Recorreré lentamente la periferia de tus hemisferios,
me sumergiré, subrepticio, bajo tus suburbios excitantes,
pues necesito yacer en lo más hondo de los sentimientos,
hasta oír el aroma de tu voz, llamándome, como una oda espectral.

Navegaré tus recodos impensados, disfrutaré sinfonías
en el universo que surgirá ante mis absortos sentidos,
entonces te sentiré , toda, sobre mi pentagrama de emociones,
y recrearás cual "prima donna", tu aria más encumbrada.

Ya no culminarán nunca mis viajes hacia tu recóndita morada,
el otro lado del mundo es aquí, necesito detentarlo, ahora,
me atrapó como un estigma desde que descubrí la ruta
de tus míticas moiras, que me mimetizaron con Ulises.

¿Quien pondrá los límites a la sin razón de lo espontáneo,
por qué presumir que no tiene sentido lo que resta por vivir,
en este apasionado síncopa de los que se oyen sin hablar,
se acarician en distintos idiomas, aún con sus pensamientos?.

Hoy mi nave surcará nuevamente tus corrientes marinas,
oriéntala hacia esa alborada, yace sutilmente en mi desatino
de intuirte mi eterna amada, ansiando invadir hasta tu magma;
jamás renunciaré a esa boca omnipotente, tu fatuo sello distintivo.

FERNANDO, EL NAVEGANTE DE MARES, RIOS Y SUEÑOS . . .